En el presente, como Alma eres inconsciente de Dios y de la Dicha de Dios. Ahora tu mente sufre o es feliz de acuerdo a tus impresiones. Abandona a tu mente y serás tu Yo Real.
Más allá de la vida encarnada en el nacimiento y más allá de la vida después de la muerte, el Alma tiene una existencia eterna e indivisible. Si la muerte tiene algún valor, es enseñar al individuo el verdadero arte de la vida.
No busques la muerte ni le temas y cuando venga a ti, la muerte se convertirá en un escalón a una vida más alta.
Eres infinito. Estás realmente en todos lados; pero crees que eres el cuerpo y por lo tanto te consideras limitado. Si miras en tu interior y experimentas el Alma en su verdadera naturaleza, te darás cuenta que eres infinito y más allá de toda la creación.