La vida externa de Buda fue la más sencilla de todos los Avatares conocidos. No sólo pasó la mayor parte de sus cuarenta y cinco años de enseñanza dentro de una zona geográfica relativamente pequeña sino que su vida de renunciamiento puso de relieve sus propios mensajes.
Buda fue el ser perfecto que renunció al mundo y mostró que, cuando una persona renuncia a todo en este mundo ilusorio, se funde con Dios. Sin embargo, Buda no exigió una vida de renuncia externa; de hecho, impartió enseñanzas específicas para los padres de familia y a la gente que trabajaba en el mundo. Sin embargo, desde su punto de vista, la vida de renuncia externa facilitaba el avance espiritual.
Baba no reclamó ni hizo hincapié en una vida de renunciamiento externo. Comentó que muchos individuos que viven una presunta vida “espiritual” de renunciamiento externo están en realidad escapando simplemente de sus responsabilidades. A diferencia de la vida sencilla de Buda, Baba recorrió varias veces el mundo, visitó tales “centros de la ilusión'' como lo son Hollywood y Wall Street, y utilizó libremente toda la tecnología del mundo moderno. Sin embargo, caracterizar a Meher Baba como apegado de alguna manera a las cosas de este mundo sería totalmente incorrecto. Su Nueva Vida, descrita en el capítulo sobre su vida, incluyó fases de arduo renunciamiento externo. De todas las fases de la extraordinaria existencia de Meher Baba, la Nueva Vida es la que más reminiscencias trae de Buda.
A Baba no le agradó que la palabra “renunciamiento” caracterizara la Nueva Vida. Prefirió la palabra “Satyanashi”, que él inventó. Hizo este comentario: “Es enorme la diferencia que existe entre renunciamiento y Satyanashi. El renunciamiento puede ser practicado y desarrollado por cualquiera, y tiene calidad y grado en relación con diferentes tipos de renunciantes. Pero no se puede practicar Satyanashi. No es la búsqueda de cualquier persona. Satyanashi llega y no se lo puede resistir.”31 También comentó: “Por lo tanto, si alguien les pregunta qué es esta Nueva Vida, díganle: ‘Es absoluto y perfecto renunciamiento’. Si les preguntan: ‘¿Renunciamiento a qué?’, respondan: ‘A todo: a aspiraciones, esperanzas, ayuda, y a la vida misma.’”32
La mendicidad de Baba durante la Nueva Vida en Benarés tenía reminiscencias de Buda. Vestía un kafni blanco, llevaba un talego de color ocre y un cuenco de latón, y caminaba descalzo. Cuando los compañeros salían a mendigar, su aspecto era similar al de Baba. Desempeñó el rol del perfecto buscador de Dios, así como Buda había desempeñado el rol del buscador perfecto antes de su iluminación y continuó viviendo la vida de renunciamiento externo después de su iluminación. Baba se encargó de visitar Sarnath en el comienzo de la Nueva Vida. Bhau Kalchuri escribe esto:
Para los budistas, Sarnath es el lugar más sagrado de todo el mundo. Sarnath se conecta con los tiempos de Buda Gautama, siendo el lugar en el que, después de su Iluminación total en Bodhigaya, predicó su primer sermón e inició a sus primeros cinco discípulos. Después de este tiempo, la sede de Buda siguió estando solamente en Sarnath, y allí estableció su primer centro de actividades para toda la India.33
Baba introdujo a las mujeres en unas habitaciones subterráneas de piedra, que se usaban para meditar en uno de los templos de Sarnath. Le pidió a su hermana Mani que anotara en un papelito el nombre de los Avatares conocidos en este ciclo. Mani escribió los nombres de Zoroastro, Rama, Krishna, Buda, Jesús y Mahoma. Baba guardó la lista en su bolsillo al encaminarse hacia las habitaciones subterráneas.34 En este advenimiento, Baba combina las personalidades y el trabajo de todos los Avatares anteriores.
Durante la época de Buda, Sarnath era un bosque en el que había ciervos y que se conocía como Isipatana; Buda lo utilizaba para predicar a sus discípulos. El Buda de los tiempos modernos llevaba a sus discípulos a las ruinas de los antiguos templos, guiándolos aún por el mismo sendero que lleva hacia Dios. Las circunstancias externas de la vida pueden cambiar, pero las realidades internas del sendero espiritual siguen siendo las mismas. “Esta Nueva Vida es interminable”, dijo Meher Baba. De hecho, “esta Nueva Vida será vivida eternamente, aunque no haya nadie para vivirla.”35 La visita de Meher Baba a Sarnath simboliza al Avatar insuflando nueva vida en las ruinas de las antiguas religiones. La esencia del Budismo, la búsqueda de Dios, “vivirá por sí sola eternamente” e iluminará siempre el camino para el aspirante espiritual. Mani, la hermana de Meher Baba, que fue una de las discípulas que lo acompañaría en la Nueva Vida, hizo hincapié en el tema budista de la Nueva Vida: “Como lo hizo Buda con sus discípulos, a lo largo de esta etapa de nuestra vida de renunciamiento y pobreza compartíamos solamente la comida que nos ofrecían como ‘Bhiksha’ (o sea, limosna.)”36 Así el Avatar actualiza (o renueva) su propio trabajo de anteriores advenimientos.
Una de las encantadoras costumbres de Buda, que Meher Baba compartió, fue la de permitir que sus seguidores prestaran o dieran sus propiedades para que el Avatar las usara libremente. Antes de que Siddhartha fuera develado, fue a la ciudad de Rajagaha cuando el rey Bimbisara estaba a punto de sacrificar muchos animales. Siddhartha persuadió al rey para que, en lugar de eso, dejara a los animales en libertad. Siddhartha conmovió tanto al rey que éste le pidió que se quedara compartiendo su reino con él, pero Siddharta no aceptó el ofrecimiento diciéndole que, cuando encontrara el Reino de la Verdad, regresaría y lo compartiría con él.37 Después de su develación, Buda cumplió lo que le prometiera al rey Bimbisara y regresó a Rajagaha. Después de asistir a un discurso de Buda, el rey decidió regalarle a Buda un bosque de bambúes, que fue aceptado por Buda como un amoroso obsequio para su labor. Buda se quedó muchas veces en ese bosque de bambués y la gente se reunía allí con él para escuchar sus discursos y buscar su consejo espiritual.38
Anathapindika, un seguidor laico de Buda, quería crear en Savatthi, la capital de Kosala, gobernada por el rey Pasenadi, un retiro para Buda y sus discípulos que habían renunciado al mundo. Después de andar buscando por los alrededores, Anathapindika decidió que el parque del príncipe Jeta cumplía con los requisitos para ser el retiro de Buda. El príncipe ofreció en broma venderle el parque si el dinero de la compra lo desparramara totalmente por el parque y, para su sorpresa, Anathapindika aceptó la oferta. Cuando el príncipe Jeta miraba cómo los hombres de Anathapindika esparcían las monedas de cobre por todo el parque, la devoción de Anathapindika lo conmovió tanto que le dio el parque de regalo. Fue construido un pequeño monasterio, y la gente llegaba de cerca y de lejos para escuchar ahí las enseñanzas de Buda.39
Estos episodios de amorosa generosidad no fueron aparentemente los únicos. Entre los ricos llegó a ser una práctica generalizada dedicar a Buda sus jardines y terrenos para que él los usara.40 Esta idéntica costumbre de amorosos obsequios al Avatar se repitió en la venida de Meher Baba.
Al comenzar la cuarta década del siglo XX, Meher Baba pidió a dos de sus discípulas occidentales más cercanas que buscaran un centro adecuado en Estados Unidos, y les estipuló determinadas condiciones que este centro necesitaría cumplir, una de las cuales era que la propiedad tenía que ser un obsequio de corazón. En 1944, el padre de una de una de estas discípulas cercanas le dio a ella varios cientos de acres en Myrtle Beach, Carolina del Sur, y la discípula le ofreció la propiedad a Baba como un obsequio de corazón. Baba aceptó amorosamente el regalo y le cablegrafió a otra discípula: “Feliz de encontrar en todas tus cartas acerca de Myrtle Beach, todo lo que personalmente y espiritualmente apruebo y autorizo. Todos mis amantes deberían cooperar para hacer que Myrtle Beach sea la Morada Espiritual para todos y cada uno”.41
El Meher Spiritual Center, en Myrtle Beach, es un retiro encantador y hermoso, un lugar maravilloso para que los recién llegados aprendan acerca de Baba y para que los devotos antiguos se reconforten. El centro tiene cabañas para vivir, instalaciones para cocinar, una sala de reuniones, una biblioteca, una casa construida para Baba y sus discípulos cercanos, y una cantidad de sendas naturales y bosques inexplorados. Baba permaneció en este centro imbuido de su amor en 1952, 1956 y 1958. Las instalaciones de Myrtle Beach y el amor con que fueron donadas hacen recordar muchísimo los amorosos obsequios de propiedades a Buda.
En la quinta y sexta década del siglo XX, la Maharani (Reina) de Baroda puso su “mansión” de Poona a disposición de Baba para que la usara durante los meses calurosos del año, o sea, en abril, mayo y junio. La Maharani se consagró totalmente a Meher Baba, complaciéndose en servirle. Su “chalet” era un palacio que quedó de los principescos reinos de India. Baba solía decir a sus discípulos más cercanos: “In March, you march to Poona” (“En marzo, marchen a Poona”), cuando era tiempo de mudarse de Meherazad a Poona, pues allí vivirían en el “chalet” de la Maharani; el “chalet” llegó a conocerse como “Guruprasad”. Baba invitó a muchos de sus amantes a reunirse con él en Guruprasad, y varias veces celebró darshans allí. En 1962, Guruprasad fue el sitio del East-West Gathering (Encuentro de Oriente-Occidente), un acontecimiento único y sin precedentes que congregó a los amantes orientales y occidentales de Baba para disfrutar su compañía.
Las propiedades relacionadas con el trabajo de Baba en India también fueron amorosos obsequios. Meherabad fue hogar de Baba durante dos décadas, y las propiedades tenían allí un dispensario, escuelas, habitaciones para quienes residían allí e instalaciones para reuniones. Ahora Meherabad tiene la tumba de Baba y un centro de peregrinación con habitaciones para los peregrinos visitantes. Meherazad fue el hogar de Baba desde 1946 hasta que abandonó su cuerpo en 1969. Meherazad es la casa en la que viven los discípulos que sobreviven, pero será un lugar de peregrinación cuando esos discípulos mueran. Las oficinas del Avatar Meher Baba Trust (Fideicomiso Avatar Meher Baba) están en Ahmednagar y fueron amorosos obsequios. Todas estas propiedades las posee y administra actualmente el Avatar Meher Baba Trust, y Baba convirtió un amoroso regalo que le hicieron en un amoroso regalo que él les hizo a sus seguidores. Después de llevar a un grupo de sus amantes a la tumba de Meherabad en 1955, Baba les dijo: “Ustedes son muy afortunados porque yo mismo los traje a mi última morada. Luego de sesenta años, este lugar será un centro mundial de peregrinación.”42
El Avatar entra siempre en conflicto con ciertas arraigadas costumbres religiosas de la cultura en la que nació. Jesús arremetió agresivamente contra la arrogancia y la hipocresía del sistema religioso judío. Mahoma declaró la guerra contra los paganos que habían corrompido la sagrada Kaaba y la peregrinación a La Meca. Baba destruyó numerosos estereotipos y falsas suposiciones sobre la vida espiritual. Buda no fue diferente.
Buda no tenía tolerancia con el sistema de castas, que en su época se había convertido en una excusa para el fanatismo y la crueldad. El alma no tiene casta; Buda no permitía diferencias que se basaran en castas dentro de la orden monástica que él creó, y sus enseñanzas estaban al alcance de todos independientemente de las castas.
El hecho de que Buda admitiera a una mujer intocable causó muchísima agitación en la comunidad local. Buda utilizó este evento para ilustrar con una historia lo irracional que era el sistema de castas, y su magnetismo personal apaciguó los perturbados sentimientos de los integrantes de la comunidad.43 En otra ocasión, Buda conoció a un intocable que era recolector de residuos y tenía vergüenza de presentarse ante él. El amor de Buda disolvió la reticencia del hombre, y Buda lo invitó a convertirse en discípulo. El amor de Buda conmovió tanto a este hombre que aceptó de inmediato, feliz de abandonar su vida miserable. Posteriormente llegó a ser un distinguido integrante de la orden.44
Buda atacó en todos los frentes al sistema de castas. No causa sorpresa que los brahmines fueran los principales propulsores del sistema de castas porque eran la casta más alta y se consideraban la élite de la sociedad. En un diálogo con un brahmín, Buda pudo obligarlo a admitir que no se podía ser un verdadero brahmín si se carecía de sabiduría y virtud. Como Buda explicó, estas cualidades puede obtenerlas cualquier persona mediante arduo trabajo y disciplina. Así Buda utilizaba el diálogo como una herramienta para explicar que un verdadero brahmín, cualquiera que sea el origen de su nacimiento, es quien tiene sabiduría y virtud.45
Dos mil quinientos años más tarde, el Avatar regresó a India para continuar demoliendo el sistema de castas. Baba recalca que él “no da importancia a los credos, los dogmas, las castas o la celebración de ceremonias religiosas y ritos sino a la comprensión de las siete Realidades siguientes…”46 Su vida refleja su intolerancia con el sistema de castas y su compasión hacia quienes sufrían la discriminación que ese sistema infligía.
En una de las escuelas que funcionaban en Meherabad en la segunda década del siglo XX, Baba trabajó incansablemente destruyendo el prejuicio con los niños harijans (la casta intocable a la que Gandhi llamó “harijans” o “Niños de Dios”). Prestaba muchísima atención a estos niños intocables y los bañaba dos veces por semana. Si venía alguien que quería su darshan, Baba le decía: “¡Si has venido por el darshan de Dios, estos niños harijans son mi Dios! Eres bienvenido a Meherabad si estás deseoso de servirles a ellos, de otra manera deberías adorar a tu propio Dios en tu hogar o tu templo. ¡El único Dios que hallarás aquí son estos niños!”47
En la tercera década del siglo XX, Meher Baba aceptó que un humilde aldeano, que vivía cerca de Meherabad, lo invitara a comer. También fueron invitados varios harijans. Un hindú de la casta alta rechazó la invitación. Meher Baba lo mandó a buscar y le dijo: “Si todavía tiendes a perpetuar las diferencias de castas, es mejor que te marches de Meherabad. ¡No me importaría en lo más mínimo que te marcharas! No dejaré que estos prejuicios malogren mi trabajo ni permitiré que esta aldea, que está conectada conmigo, reniegue y sea perjudicada por alguien obsesionado por estas viejas intolerancias.”48 El pobre hombre estalló en llanto y le explicó que estaba físicamente exhausto y no tenía prejuicios hacia los harijans. Entonces Baba lo perdonó.
Cuando Baba estaba trabajando en la que ahora es la frontera entre India y Paquistán (la separación de India y Paquistán no ocurrió hasta 1947), en 1943 Baba trajo con su grupo al hijo de un barrendero. En un cambio de roles, Baba ordenó a uno de sus mándali que se pusiera al servicio de aquel chico, lo acompañara para que fuera al cine y lo mimara de otros modos. Un día el niño maldijo al discípulo porque había pasado un camión llenándolo de polvo. Más tarde Baba reprendió al discípulo y le dio esta explicación: “Tú lo odias porque eres un brahmín y él es un barrendero. Para que te quites ese odio del corazón te he asignado deliberadamente este trabajo de que estés a su servicio. Deberías estar agradecido (al niño) por ayudarte a erradicar de tu interior este prejuicio. Tú lo odias y también lo envidias. Él no te odia ni te envidia. Esto muestra que Amir es un verdadero amir (noble), mientras tú eres un mendigo.”49
Como resultado del persistente trabajo del Avatar, la Constitución de la India prohíbe ahora la discriminación racial. Aunque India no se halla ciertamente libre del prejuicio de castas, la suerte de las clases más bajas ha mejorado. El trabajo del Avatar es continuo. Aquí Baba continuó desde el punto en que Buda dejó, e hizo avanzar la continua cruzada de Dios contra el sistema de castas.
Todos los Avatares han trabajado para mejorar la condición social de las mujeres. Todos los Avatares indios, incluso Buda, han enseñado la verdad de la reencarnación. Sin embargo, el mero hecho de que cada alma debe alternar entre un género y otro durante el proceso de la reencarnación no hace suficiente justicia. Dios está decidido a que los hombres y las mujeres sean iguales, y cada Avatar ha contribuido a ese objetivo. El trabajo se ha completado en el último advenimiento.
Buda juró que quería ver que tanto los hombres como las mujeres pudieran ser un ejemplo de la vida que él enseñó.50 Además, Buda no diferenció la capacidad de hombres y mujeres para avanzar por el sendero espiritual.51 Puesto que el alma no tiene género y cada alma debe encarnar como hombre o como mujer, causa poca extrañeza que, desde el sabio y virtuoso punto de vista de Buda, él distinguiera más al alma que al género. En verdad, algunos de los mejores discípulos de Buda fueron mujeres.52
La igualdad espiritual de los sexos puede parecer evidente a la luz de las enseñanzas de Buda. Sin embargo, todas las tradiciones religiosas han discriminado a las mujeres en el pasado. En Oriente consideraban que los que renunciaban al mundo eran la élite del mundo espiritual, y estos individuos eran varones en su mayoría. A las mujeres se les solía pedir que fueran pacientes hasta que en una vida como varones se convirtieran en renunciantes. Buda modificó esa norma creando una orden monástica para las mujeres.53
Buda fue igualmente estricto al no imponer a las mujeres tareas diarias que fueran desproporcionadas para ellas. Fijó la norma de que los hombres no deberían pedir a las mujeres que hicieran por ellos su trabajo, para que las mujeres tuvieran su tiempo necesario para meditar como es debido.54 En la orden del Maestro había que renunciar a las viejas actitudes sexistas. El Avatar actual retomó el trabajo de Buda y universalizó aún más la igualdad de los sexos.
Buda, como Meher Baba, fue develado por un Maestro Perfecto femenino. Este acontecimiento tuvo importancia simbólica en los advenimientos de Buda y de Meher Baba, y presagió la elevación de la condición femenina. Buda inició en su orden, entre muchas otras mujeres, a su madrastra y a su esposa.55 Tal vez estas mujeres fueron las dos que integraron el primer círculo del Avatar. La familia de Buda dio así el ejemplo de buscar la verdad mediante el renunciamiento. En posteriores años de la vida de Buda, a las mujeres se las trató cada vez más con un respeto que anteriormente no se había visto en esa parte del mundo.56
Sita fue la compañera de Rama en sus años errantes. Krishna tuvo sus gopis; Buda no hizo diferencias entre los géneros; Jesús invitó libremente a las mujeres a que lo siguieran y asistieran a sus sermones; Mahoma pidió a sus seguidores que se casaran con mujeres y las protegieran en lugar de disponer de ellas como objetos sexuales; y Meher Baba continuó esta centenaria tarea. Su postura sobre las mujeres es sencilla: “Ella es igual al hombre.”57
Las mujeres desempeñaron un rol de fundamental importancia en el trabajo de Meher Baba. Fueron las mujeres quienes hicieron el trabajo de Meher Baba en Occidente.58 Meher Baba envió mujeres para que buscaran su centro espiritual en Estados Unidos, y fue una mujer la que aceptó de su padre un terreno en Myrtle Beach, dándoselo luego a Meher Baba para su trabajo. Esta misma mujer manejó el Blue Bus durante los viajes de Meher Baba en India en la tercera década del siglo XX. Fueron cuatro las mujeres que acompañaron a Baba en su Nueva Vida. Una mujer encabezó el grupo encargado de organizar el viaje de Meher Baba a Estados Unidos en 1956. Y Meher Baba pidió que una mujer dirigiera el Sufism Reoriented (Sufismo Reorientado) que realizó un importante trabajo en favor de su causa.
El género carece de importancia para Dios. Baba relató en Myrtle Beach la historia de Mira, una princesa que vivió hace trescientos años en India y cuyo amor a Krishna fue legendario. “Yo soy Krishna. Quiero que todos ustedes me amen como Mira me amó.”59 De manera parecida Meher Baba elogió a Santa Teresa de Ávila: “Eso es lo más importante. Ella me amó; ella consagró su vida completamente a mí.”60
Dios es masculino y femenino, y también está más allá del género. Sin embargo, hasta este último advenimiento, el Avatar puso principalmente de manifiesto el aspecto masculino de Dios. El advenimiento de Baba es único porque el Avatar fusionó los aspectos femenino y masculino de Dios. En 1958, en India, Baba reflexionó sobre este tema en un discurso dirigido a los orientales:
Volvemos ahora otra vez al Dios en el Más Allá, Quien es Padre y Madre en una sola persona. Durante ciclos y ciclos temporales, después de siglos, cuando Dios desciende como el Avatar en este plano material, siempre toma forma masculina. Nunca nace como mujer. Los Avatares son los Hijos del Padre en el estado de Más Allá. Todos los períodos de Avatares del pasado fueron testigos de la presencia del Avatar como el Hijo sano, lúcido e intelectual del Dios del Más Allá. Esto significa que, en mis advenimientos anteriores, siempre permanecí como el Hijo Amado de mi Padre.
Pero en el pasado, el Dios en el Más Allá no tuvo ocasión de desempeñar el papel de Dios Madre. En este período Avatárico, Dios Padre está muy complacido conmigo porque soy infinitamente lúcido, infinitamente inteligente, infinitamente brillante, ustad (magistral), etcétera. Yo hago promesas pero no las cumplo. (El grupo rió.) Soy lúcido y sagaz, como mi Padre quiere que yo lo sea, y soy el Hijo Amado de mi Padre.
Al mismo tiempo estoy físicamente discapacitado en este cuerpo. En 1952, en Estados Unidos, me fracturé el lado izquierdo de mi cuerpo físico de pies a cabeza. Ahora, en India, en el reciente accidente automovilístico, el lado derecho quedó completamente destruido. Además de estar discapacitado físicamente, soy infinitamente bhola (inocente), ingenuo y fácil de engañar. Por lo tanto, escucho siempre todo lo que ustedes dicen y me avengo a lo que ustedes desean. No tengo fuerza para decirle NO a cualquiera de ustedes, ni para negarme a cualquiera de sus pedidos a pesar de mis planes, instrucciones y circulares. De manera que también soy el Hijo bienamado de Dios como Madre. En esta encarnación del Avatar, Dios tiene, por así decirlo, la posibilidad de representar el papel de Padre y Madre.61
Lo que en la era moderna consideramos “feminismo” es un proceso que se inició hace miles de años. El Avatar se ha esmerado en cada advenimiento en elevar la condición de la mujer. En este advenimiento, el Avatar se propone hacer que este proceso se complete naturalmente. Los hombres y las mujeres son iguales. El alma está más allá del género. Dios se complace actualmente en representar el papel de Padre y Madre, y de fusionar los aspectos masculino y femenino de Él Mismo.