Aunque el Avatar encarna la perfección en la forma humana, Él no es un modelo a imitar. Se aconseja indebidamente a la gente que trate de repetir la singular vida del Avatar. Los amantes de Baba (si no recibieron Sus órdenes específicas) no deben intentar obligarse a guardar silencio, comprometerse a largos períodos de ayuno y reclusión, o tratar de trabajar con almas avanzadas que experimentan la divina embriaguez. De manera parecida, los musulmanes devotos no han de presentarse como el Mensajero del Arcángel Gabriel o el instrumento puro de Allah. Los cristianos no han de intentar caminar sobre las aguas o realizar milagros, etc.
El Avatar es la meta de la vida para aquellos que no la han alcanzado. El Avatar “restaura el parámetro de los valores humanos interpretándolos en función de la vida divinamente humana”47 Él demuestra que una vida pura y desinteresada no es solamente para los que son santos o renunciaron al mundo, y que puede vivirla cualquier ser humano lidiando con los desafíos de la vida diaria en la era en la que el Avatar aparece.
El Avatárico Paradigma de perfección inspira a la gente durante las generaciones venideras:
El Avatar despierta a la Humanidad contemporánea para que Realice su verdadera naturaleza espiritual, le da la Liberación a aquellos que están preparados, y acelera en Su época la vida del espíritu. Queda para la posteridad la estimulante potencia de Su ejemplo divinamente humano: la nobleza de una vida vivida en sumo grado, de un amor exento de deseos, de un poder que sólo es usado para los demás, de una paz no perturbada por la ambición, y de un conocimiento no opacado por la ilusión. El Avatar ha demostrado que una vida divina para toda la Humanidad, una vida celestial sobre la Tierra, es posible. Los que tengan la valentía y la integridad necesarias podrán ir en pos de esto cuando quieran.48
Ciertos patrones de comportamiento tienden a repetirse en cada advenimiento del Avatar. El Avatar trabaja, en cada venida, para mejorar el estatus de las mujeres. Baba convocó especialmente a varias mujeres para que lo ayuden a llevar a cabo Su trabajo en Occidente, y hay innumerables ejemplos de Su llamada a mujeres para desempeñar roles clave en su trabajo. El mundo ha sido testigo de una revolución continua en el estatus de las mujeres durante y después de la vida del Avatar en el siglo XX, incluyendo mujeres que asumen roles en el comercio y también en profesiones, y llegan a ser Jefas de Estado como en la India y Paquistán. Mahoma nació en una cultura que trataba a las mujeres como mercancías y, aunque permitió la poligamia, impuso a todos los hombres el deber religioso de casarse con las mujeres con las que habían tenido relaciones. Jesús permitió que las mujeres lo siguieran junto con los hombres, modificando el modelo segregativo que existía entre hombres y mujeres según la tradición judía. Buda estableció una orden monacal femenina, permitiendo de esta manera que las mujeres llevaran una vida de renunciamiento igual a la de los hombres.
El trabajo del Avatar en un nivel cósmico tiene frecuentemente su contrapartida en los sucesos diarios de Su vida. Mehera, la discípula más cercana de Baba, resultó herida junto con Él en el accidente que Baba sufrió en Oklahoma en 1952. Ese accidente hizo que Mehera tuviera cada vez más contacto con los hombres. Una de las discípulas cercanas de Baba (Ivy Duce), que fue llamada para que ayudara después del accidente, informó lo siguiente:
Otro plan que él [Meher Baba] estaba elaborando me parece que fue el de la libertad de las mujeres en el mundo entero. Mehera había estado completamente recluida y alejada de los hombres hasta esta situación. Después del accidente Baba inició un proceso gradual reintroduciéndola con los hombres y el mundo en general. Puesto que el Avatar usa a las dos mujeres de su círculo en su trabajo contra Maya, parecería que él cortó las ataduras del género femenino en todo el mundo liberando a Mehera de todas sus restricciones anteriores.49
El Avatar también trabaja con los niños, los pobres, los alienados, los parias de la sociedad, los enfermos y discapacitados, y también con los que se inclinan por la espiritualidad. No podemos deducir de este trabajo que el Avatar procure crear una utopía o una sociedad completamente igualitaria como aquellos ideales planteados por ciertos sistemas políticos. Aunque un mundo completamente espiritual resolverá inevitablemente la mayoría de los problemas sociales para los que ahora buscamos soluciones políticas, el objetivo del trabajo del Avatar nunca será producir la perfección materialista per se, porque la Creación es ilusoria: es la sombra de Dios.
El Avatar pasa inevitablemente recluido largos períodos que no se parecen a la reclusión practicada por personas corrientes por razones artísticas, espirituales o misantrópicas. Como un Ser Perfecto, el Avatar no necesita cumplir nada para Sí Mismo ni adquirir aptitudes espirituales. Baba comentó sobre Sus propios períodos de reclusión:
El confinamiento físico es aparente, no real. No me molesta para nada. Ciertas clases de trabajo que tengo que hacer en reinos que no son físicos me inducen automáticamente a encerrarme en un sitio pequeño. Después de llegar a ser perfecto, Jesús vivió cuarenta días y cuarenta noches en una montaña por la misma razón, sin siquiera permitir que sus apóstoles se acercaran a él.50
El Avatar pasa gran parte de Su vida viajando o deambulando. Baba efectuó varios viajes por todo el mundo en la década del treinta y del cincuenta, utilizando plenamente barcos, trenes, aviones y automóviles. También viajó extensamente en la India utilizando todos los modos de viajar. En lo que Él llamó la Nueva Vida, Baba anduvo a pie por la India reproduciendo similares aventuras de Avatares anteriores. Mahoma tuvo que marcharse de La Meca para reubicarse en Medina, y abandonó Medina para pelear con sus seguidores en muchas batallas. “Jesús no tuvo techo sobre su cabeza y debió deambular todo el tiempo.”51 Buda pasó casi medio siglo caminando de pueblo en pueblo mientras enseñaba, iniciaba y fomentaba el desarrollo de sus seguidores. Rama tuvo que andar por el desierto durante catorce años.
Deambular así parece subrayar el hecho de que el Avatar no tuvo en el mundo otro “hogar” fijo que los Corazones de quienes lo aman. Este deambular también pone de manifiesto el perfecto desapego interior propio del Avatar. Él exhibe el mismo amor carismático ya sea que esté en Su casa reuniéndose con la gente o en el camino sin tener un techo sobre su cabeza. Cuando estuvo desterrado en el bosque durante catorce años, Rama efectuó la transición de príncipe a asceta con alegría y perfecta ecuanimidad. El Avatar está igualmente en casa, y no lo está, en cualquier lugar del mundo. Como lo comentó Mahoma:
¿Qué tengo que hacer con este mundo? Yo y este mundo somos como un jinete y un árbol debajo del cual el jinete se guarece. Luego este último sigue su camino y deja al árbol detrás de sí.52
El Avatar entra en contacto con distintas personas en muy diversas situaciones. Muchos son atraídos hacia Su amor divino; a otros no podría gustarle menos; sin embargo, otros se oponen a Él y lo desprecian. Además de Su personalidad carismática y del inimitable humor que lo caracteriza, el Avatar tiene un sello distintivo, con el cual Él se deleita al revelarlo. Ese sello es Su divina omnisciencia.
Hay numerosos ejemplos de omnisciencia en la vida del Avatar. Por ejemplo, el siguiente episodio ocurrió cuando Baba estaba viajando por la India:
Ayer a la tarde, mientras íbamos a visitar al santo antes mencionado, nuestro vehículo pasó frente a un gran templo. En ese momento, Baba le dio un codazo a Kumar y, señalándole un tamarindo, gesticuló: “Tu naciste bajo ese árbol, ¿no es cierto?”. Kumar, mostrándose totalmente sorprendido, replicó: “Sí, Baba. ¿Pero cómo sabes esto?”. Baba simplemente sonrió, y esa fue una respuesta perfecta.53
Las descripciones abstractas de esta omnisciencia no pueden compararse con la experiencia personal. La Murshida sufí Ivy O. Duce contó el siguiente episodio sobre su primer encuentro con Meher Baba en la India en 1948:
La primera tarde, después de nuestro trascendental encuentro con el Maestro. Charmian y yo estábamos en el jardín y Norina señaló un alto monte cercano, remarcando que Baba estaba allí efectuando su trabajo universal con los masts y que también estaba el grupo que me llevaría hasta ahí. Me estremecí y protesté porque posiblemente yo no podría subir. Norina me insistió en que lo hiciera, y fue entonces que la omnisciencia de Baba entró en acción.
No había electricidad en Meherabad. Se usaban faroles y, durante la noche, ponían un farol encendido frente a las puertas de nuestros cuartos para mantener alejados a ofidios y merodeadores. Baba tenía un sistema que funcionaba así: hacía sonar una campana y Goher Irani, doctora en medicina, corría hacia cualquier habitación –en la hilera de cubículos que parecían celdas en los que vivían los hombres mandali– en la que Baba estuviera en ese momento, y Baba le daba a Goher o a quien en ese instante era el mensajero designado, algunas instrucciones o directivas para que las transmitiera. Baba estaba aproximadamente a una cuadra de distancia nuestra pero la doctora Goher vino corriendo a donde estábamos nosotras y le dijo a Norina: “La señora Duce no tiene que subir por la colina”. Pronto aprendimos que él conocía todos nuestros pensamientos y reacciones y los manejaba con muchísima destreza con el fin de que trascendiéramos las limitaciones creadas por nuestras propias mentes.54
El Avatar no usa Su omnisciencia para provecho personal. La omnisciencia es simplemente una de las herramientas espirituales básicas que el Avatar usa. Él desea dar a conocer Su omnisciencia y transforma a aquellos a quienes Él la revela. Una vez que comprendemos que Dios verdaderamente sabe todo acerca de nosotros, inevitablemente vivimos nuestras vidas desde una perspectiva diferente. Los discípulos más cercanos aprenden pronto que la omnisciencia del Avatar es una parte integral de sus vidas y de su relación con Él. Bhau Kalchuri narra el siguiente episodio:
Mientras tanto, Baba regresó a la casa de Jal (Jal Villa) y se paró en silencio al lado de Bhau. Como éste tenía los ojos cerrados, no sabía que Baba estaba presente pero, después de un rato, Baba le dio un golpecito en la cabeza. Al abrir los ojos, Bhau se sobresaltó al encontrar a Baba parado frente a él. Baba le preguntó: “¿Por dónde estaba vagando tu mente? ¡El Nombre de Dios tiene que repetirse de todo corazón!”.
Bhau replicó: “No la puedo controlar, Baba. Cuando trato de hacer japa (repetir el Nombre), mi mente más vagabundea”.55
El Evangelio de Juan cuenta la historia de la visita de Jesús al pozo de Jacob, en Siquem, Samaria. Sus discípulos lo habían dejado solo y entonces una samaritana se acercó al pozo para sacar agua. Jesús se puso a conversar con ella:
Jesús le dijo: “Anda a buscar a tu marido, y vuelve acá”. La mujer contestó: “No tengo marido”. Jesús le dijo: “Es verdad lo que dices que no tienes marido, has tenido cinco maridos, y el que tienes ahora, no es tu marido”. “Señor, contestó la mujer, veo que eres profeta”.56
El Avatar revela Su omnisciencia un advenimiento tras otro. Cuando los integrantes de la tribu de Nadir invitaron a cenar a Mahoma con algunos compañeros, el Arcángel Gabriel vio al Profeta y le contó que Sus anfitriones planeaban matarlo. Entonces Mahoma abandonó inmediatamente a sus compañeros y regresó a su casa.57 En otra ocasión, Mahoma visitó en su lecho de enfermo a un discípulo cercano. Después de que el Profeta regresó a su casa, “Gabriel” lo visitó para informarle que Su discípulo había muerto.58
En la superficie, los Avatares parecen tener enseñanzas drásticamente diferentes. Por ejemplo, Buda enseñaba acerca de la reencarnación, practicaba el renunciamiento externo y no parecía interesarse en si Dios existe o no. Mahoma enseñaba que había una sola vida, vivía una vida mundana y enseñaba que la fe y la entrega a Dios eran el sentido de la vida. Krishna enseñaba la reencarnación, exhortaba a su principal discípulo a pelear en una guerra contra sus propios parientes, y pedía a la gente que no se apegara a los resultados de sus acciones. Jesús enseñaba que había una sola vida, pedía a sus seguidores que mostraran la otra mejilla y enseñaba dentro de la tradición judía.
Teniendo en cuenta la diversidad de sus enseñanzas, cabe preguntarnos cómo todos los Avatares podrían ser el mismo individuo. Baba esbozó el denominador común de las enseñanzas de los Avatares en una entrevista con el escritor Paul Brunton, en la India, en 1930, que ya se mencionó.59 El énfasis del Avatar está siempre en vivir las enseñanzas de Dios en la vida diaria. La personalidad lo es todo. Su objetivo es siempre ayudar al individuo a avanzar hacia Dios. Sin embargo, un advenimiento tras otro, las enseñanzas pueden cambiar de formas dramáticas. Baba resume esto así:
Exteriormente, el modo de vivir del Avatar es regulado por los hábitos y costumbres de los tiempos, y él adopta la actitud que más se adecue para servir como ejemplo a sus contemporáneos. Pero en esencia, todos los Avatares encarnan el mismo ideal de vida.
En la época de Zoroastro, la Humanidad era vacilante y carecía de equilibrio. En ese entonces los persas no eran ni completamente materialistas ni atraídos realmente hacia la luz espiritual. Él les enseñaba a ser buenos jefes de familia, a casarse y abstenerse de codiciar la mujer ajena, y a adorar a Dios. La propia vida de Zoroastro se basaba en este principio: pensamientos buenos, palabras buenas y acciones buenas. Zoroastro estaba casado.
En la época de Krishna, los hindúes estaban en guerra y luchaban entre ellos. Predominaban la envidia y la codicia, y desconocían un verdadero concepto de vida y amor espirituales. Krishna basaba sus enseñanzas espirituales en las leyes del amor y de la alegría pura e inocente. Los seres humanos eran orientados con alegría hacia un desinteresado ideal del amor.
En la época de Buda, el pueblo de la India se hundía en el materialismo. Con el fin de demostrar a estas personas que su concepto de los valores estaba equivocado y que eran víctimas de la diosa de la ilusión, o maya, Buda renunció a su esposa, a su familia y a la riqueza del mundo para fundar sus enseñanzas en el renunciamiento.En la época de Mahoma, los miembros de las tribus árabes eran muy sensuales y no consideraban que fuera malo o ilegal vivir con varias esposas. Si como Jesús, Mahoma no se hubiera casado ni hubiera abogado por el celibato, o si hubiera impuesto la total abstinencia, inevitablemente habría producido reacciones peligrosas. Pocas personas habrían seguido sus enseñanzas y menos aún habrían sido atraídas hacia este ideal. Mahoma tenía seis esposas, pero sin tener contacto físico con ellas.
En la época de Jesús, la arrogancia, la prepotencia, la soberbia y la crueldad eran las características de las personas. No obstante ello, tenían un concepto de justicia respecto de las mujeres y del casamiento; por lo tanto, no era necesario, como en Arabia, convertir al casamiento en un ejemplo. Jesús llevó una vida de humildad, sencillez y pobreza, y soportó el sufrimiento a fin de dirigir a los seres humanos hacia el ideal más puro: hacia Dios como el Amado.
Los Avatares encarnan en este mundo en diferentes épocas y, por lo tanto, sus enseñanzas tienen que adaptarse a la mentalidad de su tiempo. A veces, el Avatar basa Su enseñanza en la búsqueda del Dios personal, y otras veces, en la búsqueda del Dios impersonal.60