El 5 de mayo de 1937, Baba reunió a los hombres y mujeres de Occidente y les narró esta breve anécdota para dar un ejemplo de qué es la obediencia:

Una vez un Maestro pidió a su discípulo que lo despertara a las cinco de la mañana golpeándole la puerta. El discípulo se mantuvo muy despierto toda la noche hasta las cinco menos cinco, y entonces dormitó durante diez minutos, y se despertó a las cinco y cinco.

Entretanto, el lechero que solía ir todos los días a las cinco en punto, llegó a la hora habitual, golpeó la puerta exactamente en ese momento. El Maestro dijo: “Abre”, ¡y el universo se abrió para el lechero en lugar de la puerta! Pero esto fue ordenado, no fue precisamente azar.

La Realización nunca es cuestión de azar. Es algo grande. Todo está programado, todo está planificado de antemano.

— Bhau Kalchuri, Lord Meher VI.